La base de cualquier empresa reside en el cliente que realiza una demanda en concreto. Por esta razón, hoy día, en un mercado competitivo al extremo, cualquier empresa debe asumir que la atención al cliente debe de ser eficaz y competente para poder tener un público fiel a lo largo del tiempo.
De lo contrario, cuando un cliente se ha quedado insatisfecho con la atención del personal o con la calidad del producto no volverá pero además, tampoco recomendará dicha empresa a sus amistades y a su entorno más cercano. Cualquier empleado que trabaje dentro de la atención al cliente también debe asumir que además de tener un currículum acorde a la realización de esta función también debe de tener un carácter amable y cercano.
Los puntos más importantes de la atención al cliente son los siguientes:
1) El cliente siempre tiene la razón, es decir, tiene la última palabra. Esta premisa se fundamenta precisamente en el hecho de que una empresa no tendría ningún sentido si perdiera a todos sus clientes. Cuando esto sucede, la empresa cierra sus puertas, como de hecho, está pasando en algunos casos dentro de la situación actual de crisis económica.
2) Ofrece lo mejor al consumidor, es decir, cumple todas sus expectativas. Por supuesto, es esencial asumir que una empresa no debe prometer nada que luego no vaya a cumplir, de lo contrario, el cliente se sentirá decepcionado o frustrado.
3) Dentro de una empresa, la atención al cliente comienza por la atención eficaz a los propios empleados. Especialmente, dentro del trato al público, es habitual que cuando un trabajador no se siente valorado ni realizado en su empresa, pierda la motivación necesaria para atender de forma eficaz y con amabilidad a cualquier cliente. Una empresa transmite un mayor nivel de confianza y de credibilidad cuando sus empleados están contentos con el trabajo realizado y cuando existe un verdadero valor de equipo.
4) Igual que cualquier empresa trabaja durante mucho tiempo en mejorar sus campañas de marketing también es esencial dedicar el mismo esfuerzo a mejorar la atención al cliente mediante el cumplimiento de nuevos objetivos y otras metas. Existen pruebas para medir el índice de calidad de la atención al cliente, sin embargo, quien de verdad realiza la valoración cada día es el propio consumidor. Sin duda, para mejorar la atención al consumir la empresa debe de formar a sus empleados en el ámbito de la comunicación, por ejemplo, pueden realizar un curso sobre inteligencia emocional o habilidades para hablar en público.
Fuente: ellibrepensador.com