En momentos como los actuales donde se habla intensamente de defender la industria argentina, es hora de reflexionar sobre el cómo lo hace la industria local. En la industria del juguete argentino solo una fábrica está certificada bajo normas ISO 9001:2008. Esto demuestra que hay mucho por hacer en torno al tema calidad en nuestra industria y no solo pensar en tener una mayor porción de la torta del mercado.
Por Daniel Dimare
El certificar nuestro proceso de gestión de la calidad nos permitió ser más eficaces y agregarle valor a lo que hace nuestra empresa, ya que, lo que hacemos en nuestra labor diaria suele estar pensado en hacerlo mejor, en forma más eficiente (utilizando menos recursos) o con mayor rapidez.
En el mercado del juguete argentino, Juguetes RASTI (Dimare SA) en este momento, es la única fábrica certificada bajo normas ISO 9001:2008. Esto demuestra que hay mucho por hacer en torno al tema calidad en nuestra industria y no solo pensar en tener una mayor porción de la torta del mercado.
También se gana mercado a los chinos siendo mejores empresas y con productos de calidad.
No es una cuestión de marketing “tener las ISO9001”. Sí influye a la hora de trabajar con otras empresas importantes o multinacionales ya que es un “diploma” que genera mayor seguridad y credibilidad.
Lo más importante, pre y post certificación, es decir, una vez que tomaste la decisión de certificar tus procesos y hasta después de lograrlo, es lo que las ISO generan: te ayudan a pensar en mejorar en forma continua, no solo la producción y tus productos, sino tus servicios adicionales, estrategias, la evaluación de tus proveedores y empleados, la comunicación interna (con empleados) y externa (con el entorno donde se mueve la empresa), la capacitación y cada uno de los procesos que se hacen en tu empresa.
Si queremos perpetuar nuestras empresas, independientemente de la coyuntura económica, debemos hacer las cosas bien desde la primera vez y esto es darle protagonismo a la calidad en nuestra gestión, una forma de pensar a largo plazo generando relaciones comerciales y personales perdurables con productos y servicios de excelencia y no solo cuando la economía te permite ser protagonista.