Y el ganador es.... Suele ser la introducción a la presentación del ganador en una terna, por lo general en un evento relativo a la actividad artística. Y el culpable es...: podría ser una manera de presentar, en las empresas familiares, a quien se señala, con mayor o menor claridad, con más o menos consenso, y sin intencionalidad, como aquel que se puede considerar como responsable de los males que aquejan al negocio de familia. Un chivo expiatorio.
Y el ganador es.... Suele ser la introducción a la presentación del ganador en una terna, por lo general en un evento relativo a la actividad artística.
Y el culpable es...: podría ser una manera de presentar, en las empresas familiares, a quien se señala, con mayor o menor claridad, con más o menos consenso, y sin intencionalidad, como aquel que se puede considerar como responsable de los males que aquejan al negocio de familia. Un chivo expiatorio.
Es como si se hubiera llegado a un acuerdo implícito: “los problemas que tenemos, en el funcionamiento, la organización, la rentabilidad, la proyección futura, son consecuencia del modo de ser y actuar de una persona, y esa persona es....”
Un socio considera que los graves problemas que enfrentan, se deben al modo de ser del hijo de su socio. “Es la fruta en mal estado que destruye el resto”.
Un hermano de cuatro, es exhibido como quien, en su desorden personal, desorganiza la empresa, genera protestas de proveedores, y demás dificultades, e impide un funcionamiento orgánico de la empresa.
Un hijo es sindicado como responsable del maltrato en los empleados. Su carácter impulsivo, explica a las claras, que se haga imposible coordinar acciones de mejora en el plantel que desempeña sus tareas en la empresa, y productor de mal clima interno.
Si no asumen responsabilidades los hijos, es porque el padre quiere que se hagan las cosas como él dice. “No deja espacios para que nos involucremos”. Es su culpa.
Si los familiares políticos, en particular maridos y esposas, hablaran menos, todo marcharía sobre rieles.
A esta breve lista, cada uno puede agregar lo suyo.
Es uno de los dilemas que enfrentamos en el trabajo con empresas familiares. La búsqueda que se hace de alguien a quien nombrar culpable de los males, y encontrar un equilibrio que permita trabajar los temas en juego, para proyectar un mejor futuro.
Algunas reflexiones:
Por Nestor Rabinovich
www.rabinovichasesor.com.ar