Los juguetes más elegidos tienen precios que van de $300 a $2.200. Desde la Cámara Argentina de la Industria del Juguete esperan atenuar la caída de ventas en una fecha que concentra el 15% de las ventas de todo el año
Atrás quedaron el 2019 y las fiestas de Navidad. Sin embargo, el gasto para las familias continúa: en este caso por la aproximación de la celebración de Reyes Magos que será el próximo 6 de enero. Lo cierto es que todo aquello que no trajo Papa Noel, los niños se lo podrán encargar a Melchor, Gaspar y Baltazar. En ese marco y según un informe elaborado para CAME, el consumo se concentrará en centros comerciales a cielo abierto de avenidas, mientras que los juguetes más elegidos tienen precios que van de $300 a $2.200.
El estudio señaló que “el lugar con mayor proyección de demanda para realizar las compras este año son los centros comerciales a cielo abierto con un 50%, seguido por shoppings con 16% y comercio electrónico y outlets con 11%”. Destacó que los rubros que se posicionaron como más demandados fueron juguetes con un 48%, indumentaria con un 20%, libros didácticos con 8%, calzado, artículos deportivos y regalería con 4%, rodados con 3%, informática y telefonía con 2%.
Respecto de los precios de los juguetes más elegidos, el análisis indicó que van desde $300 a $2.200, según el caso. Con los valores más bajos se pueden encontrar autitos de plástico en diferentes presentaciones y masas para modelar. La oferta es muy amplia, hay pelotas de plástico por $108, juegos de masa de modelar con accesorios por $150, sets para playa con balde por $160, juegos de mesa desde $300, set de bloques de encastre desde $250 y bebotes a partir de los $350. En tanto, con un precio intermedio, en torno a los $450, se puede optar por juegos de cartas, mientras que desde $1.200 se encuentran los denominados “Pata Pata”.
Jugueteros esperan un repunte del consumo
El Presidente de la Cámara Argentina de la Industria del Juguete (CAIJ), Emmanuel Poletto afirmó que “se espera atenuar la caída de ventas respecto a la temporada del año pasado, que fue muy mala”. Asimismo, destacó que los juguetes representan el 50% de las ventas de Reyes, un porcentaje mayor que para Navidad, y que por ende es un evento muy importante para la industria del juguete. Y agregó que en algunos casos el aguinaldo y el bono de fin de año se podrían volcar al gasto de Reyes.
Los datos preliminares que maneja la CAIJ indican que para Reyes se esperan vender juguetes más económicos y contar con un ticket promedio de $450 por juguete (un 40% de incremento respecto del 2019).
En otro orden, las estadísticas de la CAIJ indican que el 80% de las transacciones en jugueterías se realizan actualmente con tarjeta de crédito. “El consumidor está aprovechando las tres cuotas sin interés que muchas jugueterías ofrecen al no cargar el interés en el precio, gracias a la extensión del Programa Ahora 3 y 6 tras el pedido de prórroga por parte de la Cámara a la Secretaría de Comercio Interior de la Nación”, destacó el titular de la CAIJ.
Por otra parte, Poletto sostuvo que para dinamizar la venta de juguetes de producción nacional es necesario que bajen las tasas del programa Ahora 12, sobre todo para los juegos de mayor valor como toboganes, triciclos, andadores, entre otros.
“Si bien la industria argentina del juguete tras la salida de la convertibilidad se reconvirtió alcanzando altos niveles de competitividad a partir de la incorporación de tecnología y maquinaria de última generación, en los últimos años, no estuvo exenta de la crisis en la industria en general”, detalló.
Y añadió que Argentina se especializa en productos de primera infancia (categoría que explica el 40% del total de la oferta), con un fuerte contenido de diseño en juguetes didácticos, juegos para playa, andarines, triciclos, camiones, muñecas, bebotes y masas, con precios muy accesibles y cumpliendo las normas de seguridad del Mercosur.
<< Las ventas del sector juguetero en Argentina se activan en tres fechas claves que concentran alrededor del 95% del total del año: Día del Niño (explica aproximadamente el 55% del total de las ventas del año), Navidad (25%) y Reyes (15%). >>
“No hay que perder de vista que Argentina cuenta con más de 200 fábricas, todas micro, pequeñas y medianas empresas (MiPyMEs) familiares altamente competitivas tras haber incorporado maquinaria de última generación y tecnología que permitió robotizar la producción y automatizar los procesos productivos, obteniendo juguetes con precios accesibles, diseño y los mayores niveles de seguridad”, explicaron en la CAIJ.
Las ventas del sector juguetero en Argentina se activan en tres fechas claves que concentran alrededor del 95% del total del año: Día del Niño (explica aproximadamente el 55% del total de las ventas del año), Navidad (25%) y Reyes (15%).
Un grave problema es el contrabando que explica el 30% del mercado y ante las restricciones presupuestarias los consumidores muchas veces recurren a la compra en la vía pública, lo que pone en riesgo la salud de los niños y niñas, advirtió la CIAJ.
Las importaciones de juguetes del período enero-octubre totalizaron 11,61 millones de kilogramos netos, prácticamente los mismos niveles de 2017 y casi duplicando los valores de 2015.“Este aumento se evidenció en la duplicación de empresas que se incorporaron al negocio de la importación, hoy hay 548 importadores de juguetes en un mercado recesivo, generando sobreoferta y acumulación de stocks”, señaló la Cámara.
Y remarcaron que “los importadores se están canibalizando entre sí rematando los excedentes y con este dólar, siguen importando por la mayor espalda para financiarse y por tener menor estructura que las industrias, que es generadora de empleos de calidad pero por el poco espacio que hoy tiene en góndolas no se ve beneficiada por el mayor consumo interno”.
Al impulso reactivador del consumo se sumó ayer el Banco Provincia (Bapro), con un acuerdo con marcas de indumentarias, librerías y jugueterías, para las compras de reyes del sábado 4 de enero. La promoción consiste en descuentos de 30% y pago en hasta 3 cuotas sin interés, tanto con débito y crédito para una extensa lista de marcas de indumentaria, librerías y jugueterías. El límite del beneficio es de 2.000 pesos de reintegro por rubro y por cliente.