Los consumidores valoran cada vez más las experiencias memorables en el punto de venta. No se trata sólo de vender buenos productos a buen precio, sino de verse inmersos en un universo en el que se transmiten valores y vivencias. Las tiendas pasan a ser espacios activos y que quieren diferenciarse de su competencia.
Las tiendas pasan a ser espacios activos y que quieren diferenciarse de su competencia. El objetivo es reafirmar el punto de venta físico frente al online, en aspectos en los que las tiendas electrónicas todavía no pueden plantar cara.
Hay muchas formas de lograr esto. Aquí van siete ejemplos:
1. La librería madrileña Tipos Infames permite hojear sus libros mientras nos tomamos una copa de vino. Y organizan tanto catas como presentaciones. Mezclan así mundos que en apariencia no tienen nada que ver, pero que están relacionados con un estilo de ocio.
2. Baby Deli organiza talleres, charlas y espectáculos en sus puntos de venta, con el objetivo de crear “un pequeño universo que va más allá de las cuatro paredes de nuestras tiendas”, que integra “las actividades que programamos, los artículos que ofrecemos, nuestra revista y nuestra tienda online”, valorando además “la calidad antes que la cantidad”, como explica su directora, Tatiana Arelle, en el número 111 de la revista Puericultura Market.
3. Estos eventos funcionan. En el e-book El marketing en el punto de venta , Josep Casanovas Sirvent, propietario de la juguetería Almacenes Faro, explica que cuando organiza espectáculos de magia, “las ventas de los juegos de magia" se multiplican "por diez".
4. Las tiendas de ropa Hollister imitan una discoteca: entrada oscura, música alta, dependientes atractivos. Crean el ambiente que sus clientes buscan y con el que se sienten (o se quieren sentir) identificados.
5. En Nuremberg se celebra cada año la feria del juguete más importante del mundo y, de hecho, esta era la región juguetera más importante de Alemania. Die Spielzeugkiste es la juguetería más antigua de la ciudad y juega a subrayar sus valores históricos ofreciendo juguetes de madera, peluches y otros productos tradicionales. Nada de tabletas y licencias porque ahí no está su mercado.
6. Las tiendas Apple colocan un Ipad junto a cada producto, exponiendo las características de ese artículo y además permitiendo al cliente la posibilidad de probar la tableta, retroalimentando las ventas y permitiendo el juego con los dispositivos de la marca. Las tiendas cuentan también con El Estudio, donde un experto asesora a los clientes a la hora de sacar partido a los productos que han comprado (como editar un vídeo o preparar un álbum de fotos, por ejemplo). Además, las aperturas de tiendas y los lanzamientos de productos se convierten en eventos: los regalos a los primeros clientes provocan colas durante toda la noche anterior.
7. Adrenalina es una tienda de ropa y artículos de surf y skate. En su tienda de Miami ofrece la posibilidad de practicar surf bajo cubierto, en una piscina de olas, con cursos y monitores.
Es decir, se trata de recordar que ir de compras también es una actividad de ocio y es en este aspecto donde las tiendas físicas no tienen apenas competencia por parte del mercado online. Es el momento de aprovechar esta ventaja, ya que las tiendas virtuales cada vez sacarán más partido más los aspectos lúdicos que ofrece su entorno.